Sin cubrebocas, ni sana distancia, familias completas salieron a caminar por las calles para pedir calaverita con sus hijos este 1 de noviembre y se espera que lo mismo ocurra hoy 2 de noviembre.
Ataviados de catrinas, diablitos, brujas, momias y personajes característicos del Halloween, colonias como Ajusco y Santo Domingo y el centro de la alcaldía Coyoacán lucieron abarrotados de gente.
La sana distancia quedó atrás, los capitalinos salen de sus casas como si la pandemia de Covid-19 no siguiera vigente en la capital del país.
“Vinimos a traer a los niños a que pidan calavera, algunos hasta dinero les dan y eso es buen negocio, nos ayuda para comprar algo”, afirmó Carlos Hernández quien salió con sus hijos a pedir calavera.
Pero sin cubrebocas, se le comentó, el joven levantó los hombros y dijo: “pues ya estamos vacunados, ya no pasa nada, y dicen que el Covid no le hace nada a los niños así que para qué tenerlos encerrados”.
A la gran mayoría, según cuentan, ya les urgía salir, divertirse y socializar. Incluso existen los más osados que afirman sin ningún empacho: “al fin de algo nos tenemos que morir”.
La mayoría se encargaron de lucir sus mejores disfraces para tomarse la selfie con sus amigos y con su familia.
A pocos se les vio respetando las medidas sanitarias como el uso de cubrebocas y el lavado de manos o el uso de gel pues a la gran mayoría le interesaba, en realidad, salir a divertirse, a caminar, ver gente.
Otros aprovecharon para ir a ver las divergentes ofrendas que fueron montadas y a tomarse la foto del recuerdo en los megacráneos.
Y algunos más decidieron acudir a los panteones para arreglar con flores de cempasúchil las tumbas de los seres queridos que se adelantaron.
